¿Conoces cuáles son las prestaciones de la seguridad social en Italia? Hoy en Gestionista Italia hablaremos sobre los detalles de este sistema y quiénes están cubiertos. Si deseas establecerte y trabajar en Italia, esta información es para ti.
¿Qué es el INPS?
INPS son las siglas para Istituto Nazionale della Previdenza Sociale (Instituto Nacional de Previsión Social en español). Esta institución es la que se encarga de gestionar la seguridad social en Italia y así asegurar el bienestar de sus ciudadanos al final de su vida laboral o si atraviesan un momento difícil, como el desempleo.
Asimismo, maneja otras asignaciones como las de maternidad, las prestaciones por invalidez, de supervivencia, entre otras.
Cabe destacar que en Italia todos los trabajadores, bien sean por cuenta ajena o por cuenta propia, tienen que inscribirse en el Régimen del Seguro General Obligatorio. El INPS, junto a los demás organismos de la seguridad social se encargan de recaudar las cotizaciones y luego abonar las prestaciones a los asegurados.
¿Es obligatorio inscribirse en el Régimen del Seguro General?
Sí, de acuerdo con la ley italiana todas las personas que tengan residencia legal y que trabajen dentro del territorio italiano deben inscribirse en la seguridad social.
Lo que significa que si tu plan es sacar las partidas italianas para obtener la ciudadanía y fijar residencia para comenzar a trabajar en Italia, debes inscribirte en la seguridad social. Esto debes hacerlo ya sea que trabajes por tu cuenta o para un empleador. La diferencia en este sentido sería quien realiza la inscripción.
Es decir, si trabajas para una empresa, entonces será esta la que se encargue de hacer todo el proceso. De manera que no tendrás que preocuparte por este trámite. Sin embargo, si vas a trabajar por cuenta propia, entonces debes hacerlo tú mismo ante el organismo que corresponda.
El trámite para inscribirse puede ser confuso, por lo que es recomendable que busques una asesoría para que te guíe durante el procedimiento.
¿Cómo es el financiamiento de la seguridad social italiana?
Para poder abonar las prestaciones, la seguridad social necesita recibir las cotizaciones tanto de las empresas como de los trabajadores. Mediante este sistema se produce el financiamiento. De igual forma, los organismos de la seguridad social reciben ingresos tributarios con ese fin.
En tanto que el Servicio Nacional de Salud, que gestiona las prestaciones de salud, recibe los ingresos tributarios para su financiamiento.
Ahora veamos cómo son estas aportaciones que se hacen a la seguridad social italiana.
Aportaciones obligatorias
En primer lugar, están las cotizaciones obligatorias que son los aportes que se hacen cuando los trabajadores se encuentran dentro de una relación laboral. El cálculo depende del tipo de relación, si es por cuenta propia o por cuenta ajena.
En el caso de los trabajadores por cuenta ajena la cotización se hace cada mes. El porcentaje de la cotización se calcula sobre la base del salario del trabajador, antes de las retenciones.
La empresa paga una parte de la cotización y el trabajador otra, pero ambos aportes los hace el empleador a la seguridad social.
Los trabajadores autónomos, en cambio, se encargan de enviar ellos mismos las cotizaciones. Estos se calculan con base en los ingresos que declararon en el impuesto sobre la renta del año que se está cotizando.
Aportaciones voluntarias
Este tipo de cotización la realizan personas que han cesado o interrumpen su relación laboral con un empleado. También lo pueden hacer los trabajadores independientes.
Al no estar ejerciendo una actividad profesional no hacen las cotizaciones obligatorias. Sin embargo, pueden optar por hacer contribuciones voluntarias que les permiten mantener sus derechos de pensión.
El cálculo se hace de acuerdo al salario medio que recibió el asegurado el año antes de conseguir la autorización para las contribuciones voluntarias. Y se debe abonar cada tres meses.
Como vemos, para realizar este tipo de contribución se requiere de una autorización. Para ello, el trabajador debe haber cotizado, como mínimo, durante cinco años. O, en su defecto, tener tres años de cotizaciones en los cinco años previos a la solicitud.
Cotizaciones ficticias
Son periodos de afiliación que, aunque no se hayan cotizado, se reconocen como si el trabajador los hubiera abonado. De este modo, no pierde el derecho a las prestaciones.
Estas cotizaciones se reconocen bajo ciertas circunstancias. Por ejemplo, periodos de embarazo y parto, servicio militar, accidentes laborales, actividad sindical, catástrofes naturales, entre otros.
Cotizaciones de rescate
Se trata de cotizaciones cuyo objetivo es compensar periodos no asegurados. Por ejemplo, en el caso de que la persona haya trabajado fuera de Italia.
¿Cuáles son las prestaciones de la seguridad social en Italia?
El sistema de seguridad social italiano garantiza una serie de beneficios a las personas que estén afiliadas; bien sea que se trate de trabajadores independientes o dependientes. Estos incluyen las jubilaciones por vejez, por antigüedad, por invalidez, entre otros.
A continuación, resumimos las prestaciones de la seguridad social en Italia que establece la ley.
Pensión por vejez
La pensión por vejez es un beneficio que reciben los trabajadores una vez que han cumplido la edad que establece la ley para cesar la actividad laboral. Además, el beneficiario debe haber cumplido con, al menos, 20 años de aportes a la seguridad social.
La edad mínima para acceder a la jubilación por vejez ha sufrido varios cambios a través de los años. En la Ley n. 335/1995, esta se había fijado en 65 años de edad para los hombres y 60 para las mujeres.
Sin embargo, con la Ley de reforma de las pensiones 214/2011 se buscó equiparar la edad de jubilación tanto para hombres como para mujeres. De modo que se llevó a 66 años para trabajadores del sector privado por cuenta propia, funcionarios y mujeres funcionarias.
En el caso de las mujeres que trabajan para empresas privadas y por cuenta propia, la edad mínima aumentó de forma progresiva. Primero, se estableció en 62 y 63 años de forma respectiva a partir de 2012. Pero para 2018, en ambos casos se fijó en 66 años mínimos para la jubilación por vejez.
Este beneficio es para todos los trabajadores que cumplan con los requisitos y que, llegado el momento, no puedan seguir trabajando a causa de su edad.
Pensión anticipada
La pensión anticipada sustituye a la antigua pensión por antigüedad. Como su nombre lo indica, el trabajador puede acceder a la jubilación sin haber cumplido la edad mínima de la pensión por vejez.
No obstante, debe haber cumplido con las cotizaciones mínimas establecidas en la ley. Estas son 42 años para los hombres y 41 para las mujeres.
Prestaciones por enfermedad
Se trata de un subsidio que se le abona al trabajador si ha detenido sus labores por alguna enfermedad común. El abono lo hace la empresa y se comienza a pagar a partir del cuarto día de enfermedad y por 180 días máximos.
Pensión de invalidez
Es una prestación que se otorga a personas que hayan sufrido alguna enfermedad que les impida seguir trabajando. Para acceder a la pensión por invalidez hay que cumplir con una serie de normas establecidas en la ley.
Dentro de este derecho se reconocen dos tipos de prestaciones:
- El subsidio por invalidez que se otorga durante tres años a trabajadores que hayan sufrido una reducción permanente de su capacidad laboral en más de dos tercios. En este caso el trabajador permanece en observación y el tiempo se puede ampliar por tres años más.
- La pensión por incapacidad que se asigna al trabajador que haya perdido la capacidad total para ejercer sus funciones a consecuencia de alguna enfermedad o discapacidad. Una vez que el beneficiario alcance la edad de jubilación, se sustituye por la pensión de vejez. Además, a diferencia del subsidio anterior, se transmite a los supervivientes en caso de muerte.
Prestaciones por maternidad y paternidad
La administración de la seguridad social italiana también otorga licencia por maternidad, con un subsidio de 80 % del salario en el caso de las trabajadoras por cuenta ajena. Aquellas mujeres que trabajan por cuenta propia también reciben una indemnización durante cinco meses.
En el caso de las trabajadoras por cuenta ajena, deben dejar de trabajar dos meses antes del parto y tres meses después. Aunque pueden optar por dejar de trabajar un mes antes y cuatro después del nacimiento. Este beneficio se extiende también a madres adoptivas.
Hay casos en los que los padres también reciben esta indemnización.
Asimismo, ambos padres tienen derecho a la licencia parental que les permite ausentarse de su puesto de trabajo por un periodo no mayor a once meses.
Otras prestaciones de la seguridad social
Además de las anteriores, otras prestaciones de la seguridad social en Italia son:
- Prestaciones familiares: se otorga a familias de trabajadores dependientes cuya renta familiar sea menor a los tramos que indica la ley. Estos se evalúan cada año.
- Desempleo: se otorga a personas desempleadas por un máximo de 240 días. Si es mayor a 50 años se puede extender a 360 días.
- Accidentes laborales y enfermedades profesionales: beneficia a aquellas personas con alguna enfermedad o que hayan sufrido un accidente producto de su trabajo.
- Supervivientes: se otorga a los familiares de un trabajador que ha fallecido, siempre que cumplan con las condiciones establecidas en la ley.
El sistema de prestaciones de la seguridad social en Italia puede ser complejo. Por lo que hemos resumido los aspectos principales de cada uno de los beneficios. Si deseas trabajar en Italia, asegúrate de entender cómo funciona.
Paulo Rapino
Con 15 años de experiencia, dedicado a ayudar a obtener la ciudadanía italiana y emigrar a Europa. Ayudamos con partidas, certificados, documentos y asesoramiento en emigración a través del pasaporte italiano.
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